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Ya falta poco para las juergas navideñas. Y tú, ¿has decidido ya cuál será el menú de la cena de este año? Como siempre, nosotros ponemos el vino, y en el artículo de hoy te recomendamos las botellas que harán que tus almuerzos y tus cenas sean realmente memorables. Estas son las 3 marcas que no pueden faltar en tu mesa.
Al Chardonnay nunca se le dice que no
Este vino es el más conocido y el más bebido del mundo: por algo será, ¿no? Lo hemos elegido exactamente por ese motivo: podrás acompañar cualquier aperitivo o plato de pescado que tengas en mente y será todo un éxito. Es un vino para descorchar en el momento, perfecto también para acompañar carnes blancas. Es altamente bebible e ideal para cualquier momento del día. ¿Qué más quieres? ¡Otra botella!
La fiesta no está completa sin el 900 Gran Giordano Spumante Brut
La consigna de toda fiesta que se precie es: ¡que corra el espumoso! Este vino espumoso no puede faltar en ninguna celebración. Procede de uvas blancas particularmente aptas para la elaboración de vinos espumosos y se vinifica mediante el método charmat: la segunda fermentación le da una increíble elegancia de aromas. Es un vino muy bebible y versátil: ideal para acompañar unos aperitivos, un plato de pescado o incluso los postres. Haz acopio de este vino porque te acabarás la primera botella sin darte cuenta.
¿Barolo o Barbaresco?
Fácil: Nebbiolo Langhe Doc. Un conjunto de sensaciones capaces de satisfacer hasta al amante del vino más exigente. Es un vino que se decanta por combinaciones más contundentes, especialmente platos de carne muy sabrosos como estofados y asados. Un vino de gran espesor, no teme el paso del tiempo, al contrario, es capaz de evolucionar y expresar todas las facetas de su personalidad: plena, cálida, redonda y persistente. ¡Aprovéchalo ahora porque el año que viene será aún mejor!
